La terapia es el lugar donde, las persona adictas podemos hablar sin tapujos de nuestra situación porque estamos rodeado de personas iguales.
Nadie es juzgado en un espacio donde todos comparten la misma enfermedad y experiencias similares. Para la persona adicta ( tanto adiciones como el alcohol, cocaina, marihuana etc o como comportamentales, adición al juego al sexo etc), es una liberación encontrar el sitio donde contar lo que nunca ha contado a nadie. Por vergüenza. Por miedo.
Terapias espejo
Los grupos de ayuda mutua funcionan como un espejo donde verse reflejado y ver en los demás lo que uno no es capaz de ver en sí mismo. Son el sitio ideal para que la persona que empieza el tratamiento tenga una guía y una referencia de conducta de quienes llevan más tiempo, han recorrido más trecho y saben qué hacer para rehabilitarse.
Sin duda, la terapia es la mejor medicina para la persona adicta. Funciona como prevención de recaída y es un estímulo positivo muy potente para seguir en tratamiento.